martes, febrero 13, 2007

La radiografía de nueve museos muestra que dinamizan la economía de las ciudades


Los museos atraen el turismo hacia las ciudades donde se ubican y además contribuyen al desarrollo urbano.

Esta idea se desprende de un estudio realizado en el Museo Artium de Vitoria; la Fundación César Manrique de Lanzarote; el Guggenheim de Bilbao; el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona; el Reina Sofía de Madrid; el Museo de Arte Abstracto de Cuenca; el Museo Patio Herreriano de Valladolid; el Museo Picasso de Málaga; y el Instituto Valenciano de Arte Moderno.


EFE. Madrid | Los museos atraen el turismo hacia las ciudades donde se ubican y además contribuyen al desarrollo urbano, impulsan la creación artística local y relanzan el empleo en otros sectores, según el estudio "La dimensión económica de las artes visuales en España". Los nueve museos objeto de este estudio son el Museo Artium de Vitoria; la Fundación César Manrique de Lanzarote; el Guggenheim de Bilbao; el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona; el Reina Sofía de Madrid; el Museo de Arte Abstracto de Cuenca; el Museo Patio Herreriano de Valladolid; el Museo Picasso de Málaga; y el Instituto Valenciano de Arte Moderno.

El estudio, elaborado por la Asociación de Artistas Visuales de Cataluña y que acaba de publicarse, desglosa la repercusión de la actividad de los museos en diversos ámbitos económicos de sus respectivas ciudades, desde la revalorización del suelo hasta la incidencia en el sector servicios.

Los nueve museos estudiados recibieron en 2003 un total de 3,8 millones de visitantes, ingresaron 19,5 millones de euros y su actividad aportó 93 millones de euros a otros agentes económicos, por medio de salarios, compras, encargos e inversiones.

Financiación

La mayor parte de la financiación de los museos proviene de las subvenciones públicas, seguida del gasto de los visitantes, que comprende los ingresos por entradas, actividades diversas, cafetería y librería.

Cada visitante que acude a los museos gasta en ellos 5,82 euros de media. Los centros deben invertir 22,45 euros por cada visitante que reciben, una cantidad financiada en parte con los 9,75 euros por entrada que, según el estudio, aportan las administraciones públicas.

En cuanto a la atracción turística que los museos ejercen, el estudio destaca que el Guggenheim de Bilbao fue el más visitado de su comunidad autónoma, con casi 875.000 personas, y es también el museo con más ingresos de todos los analizados, con más de 7,1 millones.

Los centros de arte más visitados de sus respectivas ciudades fueron el Artium de Vitoria, con 75.800 visitantes, el Museo Picasso de Málaga, con 423.387, y la Fundación César Manrique de Lanzarote, con más de 300.000 visitantes -un 15,7 por ciento del total de personas que viajaron a la isla-.

Por su parte, el Reina Sofía de Madrid, con 1.444.300 visitantes y el Instituto Valenciano de Arte Moderno, con 177.435, fueron los segundos museos más visitados de sus ciudades, tras el Prado y la Ciudad de las Artes y las Ciencias, respectivamente.

La acción de los museos como estimulantes del turismo se refleja especialmente en los datos del Museo Patio Herreriano de Valladolid, donde el 52 por ciento de los 44.000 visitantes del museo en 2003 no fueron residentes, de lo que se puede deducir que entre 10.000 y 15.000 personas acudieron a la ciudad para visitar el museo.

Cuenca

También el Museo de Arte Abstracto de Cuenca destaca como principal activo turístico de su provincia, con 34.000 visitantes anuales, y que significaron un 30 por ciento del total de los turistas que viajaron a la ciudad.

El desarrollo urbanístico es otro ámbito en que los museos revalorizan las ciudades, lo que se puede apreciar con la construcción del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA) en 1996, que supuso un incremento del precio de la vivienda en el Raval de un 149,7 por ciento en seis años, sensiblemente superior a la media de la ciudad. Además, la apertura del MACBA propició planes de regeneración urbanística del barrio del Raval, que, junto con iniciativas privadas, significaron un aumento de las licencias de hostelería y de los servicios de cultura y ocio, junto con un incremento del número de profesionales del arte en la zona, según el estudio.

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