El próximo 6 de febrero se cumplirán 40 años de la explosión de al menos uno de los seis acumuladores de la instalación de recalentamiento de vapor situada al pie de la planta de la acería LD-I de la entonces factoría de Ensidesa.
Sobre las 10.25 horas de dicho día, que era sábado, y en aquellas fechas un día laborable normal, se produjeron en un par de segundos al menos tres explosiones consecutivas de una magnitud considerable. Los efectos de la onda expansiva del vapor a unos 30 bares de presión produjeron, amén de los daños en el entorno inmediato, la proyección de piezas de considerables dimensiones y peso a más de un kilómetro de distancia. //SEGUIR LEYENDO
"Salvo la aglomeración de preocupados familiares y amigos, así como numerosos donantes de sangre en las inmediaciones del Hospitalillo,"
ResponderEliminarLo recuerdo perfectamente, yo tenia 8 años y viviamos en Villalegre.La onda expansiva abrió de golpe la puerta de la terraza ...estabamos en la cocina, nos quedamos callados y esa imagen se ha quedado grabada en "mi disco duro".
Recuerdo que me lo contaste. Debio ser terrible....
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